El Decreto 847/2024, que busca regularizar a trabajadores no registrados, no incluye al personal doméstico, afectando a uno de los sectores más vulnerables de la economía informal, compuesto en su mayoría por mujeres.

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El blanqueo laboral impulsado por el Gobierno mediante el Decreto 847/2024 dejó fuera de su alcance a más de un millón de empleadas domésticas. Este sector, que representa el 70% de los trabajadores en negro, quedó sin la posibilidad de regularizar su situación laboral, lo que generó indignación entre los gremios y referentes del sector. Carlos Brassesco, apoderado de la Unión del Personal Auxiliar de Casas Particulares (UPACP), fue uno de los primeros en criticar la medida, destacando que la exclusión de estas trabajadoras no figura en la ley original.

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Actualmente, se estima que alrededor de 1,7 millones de personas trabajan en tareas domésticas en el país, pero solo 500.000 de ellas están registradas formalmente. La falta de inclusión de este grupo en el proceso de blanqueo afecta principalmente a mujeres, ya que el 97% de las empleadas domésticas son de sexo femenino. A pesar de los avances que representó la Ley 26.844 de 2013, que regula el empleo doméstico, el decreto reciente ignora a este sector, profundizando la precarización laboral.

La medida también generó incertidumbre, ya que el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) emitido por el Gobierno derogaba el artículo 50 de la Ley de Empleo Doméstico, que contempla una indemnización agravada en caso de falta de registración. No obstante, un fallo judicial anuló esta parte del DNU, dejando la situación sin resolver y afectando aún más a las trabajadoras del hogar.

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Mientras tanto, las negociaciones salariales para las empleadas domésticas continúan en un contexto de alta inflación. Sonia Kopprio, secretaria general del Sindicato de Empleadas en Casas de Familia de Río Negro y Neuquén, anticipó que buscarán un aumento del 12% para el próximo bimestre, ya que el incremento inicial ofrecido por la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares (CNTCP) fue de solo un 3%, lo cual fue rechazado.

A pesar de la exclusión en el blanqueo, las trabajadoras podrán acceder a algunos beneficios sociales. En octubre, las empleadas de casas particulares que sean madres de adolescentes entre 15 y 17 años podrán acceder a la Tarjeta Alimentar, un programa de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) destinado a combatir la indigencia infantil.

Fuente: Noticias Argentinas SA.

Foto de portada: Archivo.