Jugadores de Brown de Puerto Madryn fueron amenazados por un grupo de barrabravas armados que irrumpieron en el vestuario, exigiendo que ganen el próximo clásico ante Deportivo Madryn. La violencia en el fútbol argentino suma un nuevo episodio preocupante.

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Un grupo de barrabravas de Brown de Puerto Madryn ingresó al vestuario del equipo y amenazó con armas de fuego a los jugadores, exigiéndoles ganar el próximo fin de semana el clásico frente a Deportivo Madryn por la Primera Nacional. Los incidentes ocurrieron mientras el plantel entrenaba en el estadio Raúl Conti, dejando a varios jugadores en estado de shock, especialmente a los más jóvenes del equipo, que viven esta situación por primera vez.

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«Esto ya pasó todos los límites», declararon varios referentes del equipo madrynense a medios locales, denunciando la gravedad de lo ocurrido. Según se informó, los barras interceptaron a los jugadores durante la práctica y les advirtieron que, de no ganar el clásico, los iban a matar. Esta escalada de violencia generó gran preocupación en el club, que se encuentra en una delicada situación deportiva, último en la Zona A y en riesgo de descender al Torneo Federal A.

El equipo ya venía soportando la presión de su propia hinchada. El fin de semana pasado, durante la derrota por 2-0 ante San Martín de San Juan, los jugadores fueron atacados con bombas de estruendo lanzadas desde la tribuna local, además de recibir mensajes en banderas que les reclamaban más actitud y «huevos». Entre los principales afectados estuvieron el arquero Matías Soria y el defensor Nicolás Bazzana, quienes sufrieron insultos y agresiones directas.

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Los más experimentados del plantel reconocieron que la situación está afectando seriamente a los jugadores jóvenes, quienes no habían vivido situaciones tan extremas de violencia en el fútbol. Este escenario de intimidación pone en riesgo la estabilidad emocional y deportiva del equipo, que solo cosechó siete triunfos en 33 partidos, con 15 derrotas y 11 empates, ubicándose en el último lugar de la tabla.

El clásico del fin de semana contra Deportivo Madryn, que ya de por sí es un duelo cargado de tensión en la ciudad chubutense, se jugará en un clima enrarecido por estas amenazas. La dirigencia del club aún no emitió un comunicado oficial sobre lo sucedido, mientras que las autoridades locales investigan los hechos.

Fuente: Noticias Argentinas SA.

Foto de portada: Olé.