La madre de una niña de diez años, afectada durante la marcha contra el veto a la Ley de Movilidad Jubilatoria, presentó una denuncia y solicitó la declaración indagatoria de varios funcionarios, incluida la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

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Carla Marina Pegoraro, madre de una niña de diez años que fue rociada con gas pimienta por un policía durante la marcha contra el veto a la Ley de Movilidad Jubilatoria, se presentó hoy ante la Justicia para formar parte de una denuncia que ya había sido interpuesta por su abogado, Gregorio Dalbón. La denuncia fue entregada al Juzgado Federal número 9, bajo la dirección de la jueza María Eugenia Capuchetti, y busca esclarecer los hechos ocurridos el 11 de septiembre en las inmediaciones del Congreso de la Nación.

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Pegoraro solicitó que se cite a declaración indagatoria a varios funcionarios, entre ellos la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y otros miembros del Ministerio de Seguridad como Alejandra Monteoliva, Luis Rollé y Gerardo Ariel Perillo Scampini. También se incluyó en la denuncia al policía federal Cristian Rivaldi, señalado como el oficial que lanzó gas pimienta a la menor, según trascendidos en los medios. La madre afirmó que el ataque fue premeditado y directo, ocasionando daños tanto físicos como psicológicos a ella y a su hija.

La denuncia detalla que, bajo órdenes del Comisario Perillo Scampini, Rivaldi lanzó gas pimienta a Pegoraro y su hija Fabrizia desde una distancia menor a medio metro. La madre aseguró que la acción fue violenta y que ambos fueron afectados en los ojos. Además de los daños inmediatos, Pegoraro destacó el impacto psicológico que el ataque tuvo en su hija, quien tuvo que ser trasladada para recibir atención médica luego de la agresión.

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Un punto clave de la denuncia es el supuesto encubrimiento de los hechos por parte de las autoridades. Pegoraro y su abogado sostienen que Bullrich, Monteoliva y Rollé utilizaron sus cargos para manipular la versión oficial de los hechos, valiéndose de un video editado que buscaba minimizar la brutalidad de la represión policial durante las protestas. Esta maniobra mediática habría sido parte de un esfuerzo por encubrir la violencia ejercida por las fuerzas de seguridad.

En el marco de la investigación, se solicitó que la niña preste declaración en Cámara Gesell para proteger su integridad y obtener su testimonio directo sobre lo ocurrido. La denuncia busca no solo justicia por los daños sufridos, sino también que se esclarezca el nivel de responsabilidad de los altos funcionarios implicados en el hecho.

Fuente: Noticias Argentinas SA.

Foto de portada: Archivo.