El yogur, un aliado milenario para la salud con tecnología probiótica de vanguardia

yogur, probióticos, salud intestinal, CONICET, Danone, Lactobacillus rhamnosus, nutrición, beneficios para la salud, microbiota, sistema inmunológico, Guías Alimentarias, alimentos funcionales, tecnología alimentaria, ciencia argentina, innovación en alimentos, alimentación saludable

Desde sus orígenes hace 10.000 años, el yogur evolucionó hasta convertirse en un alimento esencial recomendado por el Ministerio de Salud, destacando por sus beneficios nutricionales y nuevas incorporaciones probióticas desarrolladas en Argentina.


El yogur, un alimento que acompañó a la humanidad durante milenios, sigue demostrando su relevancia en la dieta diaria. Surgido hace unos 10.000 años cuando pueblos nómadas conservaban la leche en bolsas de tripa animal, este lácteo evolucionó para convertirse en un componente esencial de la alimentación, recomendado por el Ministerio de Salud de la Nación en las Guías Alimentarias para la Población Argentina.

MÁS NOTICIAS | La rotura de un dique en Mongolia Interior obligó a la evacuación de más de 820 residentes

Este alimento es reconocido no solo por su versatilidad, al ser consumido en desayunos, meriendas o como parte de ensaladas y salsas, sino también por su elevado valor nutricional. El yogur es una fuente importante de proteínas de alta calidad, ácidos grasos, calcio, y una amplia gama de micronutrientes como el potasio, zinc, fósforo, magnesio, yodo, y vitaminas A, B2, B5, B12 y D. Su consumo regular puede ser clave para revertir deficiencias comunes en la ingesta de calcio y vitamina D en el país.

En los últimos años, la ciencia dio un paso más allá al mejorar este alimento tradicional con avances en su formulación. Un claro ejemplo es la reciente incorporación del probiótico Lactobacillus rhamnosus CRL 1505, desarrollado por científicos del CONICET en Tucumán, a la línea de yogures de la empresa Danone. Este probiótico, 100% argentino, demostró beneficios significativos para la salud respiratoria y gastrointestinal, destacando por su capacidad para reducir la incidencia de infecciones como el catarro de vías aéreas superiores y las diarreas agudas.

MÁS NOTICIAS | Encuentran un explosivo de 70 años de antigüedad en el Río de la Plata durante tareas de dragado

«Transformar resultados de investigación en un producto destinado a toda la población, con beneficios en salud científicamente comprobados, es un logro que nos enorgullece y motiva a continuar en el camino de hacer ciencia de calidad», comentó María Pía Taranto, investigadora del CONICET y responsable técnica del desarrollo de esta tecnología probiótica. Este avance representa un paso importante en la articulación entre el sector científico y el productivo, permitiendo que alimentos como el yogur no solo nutran, sino que también fortalezcan el sistema inmunológico.

El consumo diario de yogur, especialmente aquellos con probióticos, no solo contribuye a mantener una microbiota intestinal saludable, esencial para la digestión y el sistema inmunológico, sino que también puede ser clave en la prevención de diversas enfermedades crónicas. De este modo, el yogur continúa reafirmándose como un alimento imprescindible, tanto por su herencia histórica como por los avances científicos que lo enriquecen.

Fuente: Noticias Argentinas SA.

Foto de portada: ABC.

Tendencias