El Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la UCA revela que más de la mitad de los argentinos viven en la pobreza, mientras que uno de cada cinco es indigente.

La recesión continúa afectando gravemente a Argentina, según el último informe del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la Universidad Católica Argentina (UCA). Los datos del primer trimestre de 2024 indican que el índice de pobreza alcanzó el 54,9%, mientras que la indigencia se elevó al 20,3%.

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Las cifras oficiales, basadas en la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC, muestran un aumento preocupante en comparación con los trimestres anteriores. El informe anterior del ODSA ya había señalado una pobreza del 55,5% y una indigencia del 18,5%. Sin embargo, las cifras actuales muestran un empeoramiento significativo, con la indigencia alcanzando el 20,3%.

Este aumento se destaca aún más cuando se comparan los datos con el primer semestre de 2023. En ese periodo, los hogares pobres eran el 29,6% (40,1% de las personas) y la indigencia el 6,8% (9,3% de las personas). Esto representa un aumento del 14,8% en la pobreza y del 11% en la indigencia en tan solo nueve meses, siete de ellos bajo el gobierno de Javier Milei.

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El informe también revela disparidades significativas entre las diferentes regiones del país. Gran Resistencia, en Chaco, es el aglomerado urbano más afectado, con un índice de pobreza del 79,5% y una indigencia del 38,6%. En contraste, la Ciudad de Buenos Aires registra los menores niveles de pobreza e indigencia del país, con un 25,4% y un 8,5%, respectivamente.

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