El piloto neerlandés enfrentará una penalización de diez puestos en la parrilla de salida por un cambio de unidad de potencia, complicando aún más su situación en la temporada.

Max Verstappen, el piloto estrella de Red Bull, ha sido penalizado con una sanción de diez puestos en la parrilla de largada del Gran Premio de Bélgica. Esta decisión se debe a la utilización de una nueva unidad de potencia, excediendo así el número permitido de cambios según el reglamento de la Fórmula Uno.

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El reglamento establece que si un piloto utiliza más de cuatro cambios de la unidad de potencia en toda la temporada, será penalizado con diez posiciones en la parrilla de salida la primera vez y con cinco lugares en caso de reincidencia. Para Verstappen, esta sanción llega en un momento crítico, ya que no ha logrado ganar en las últimas tres competencias.

Red Bull ha decidido realizar este cambio estratégico en el circuito de Spa-Francorchamps, conocido por sus largas rectas que podrían favorecer a Verstappen en su intento de recuperar posiciones durante la carrera. A pesar de la penalización, el campeón del mundo mostró su dominio en la primera práctica libre, marcando el mejor tiempo con 1:43.372. Lo siguieron Oscar Piastri de McLaren, ganador del Gran Premio de Hungría, y Alexander Albon de Williams.

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La segunda práctica libre está programada para las 12:00 (hora Argentina), donde Verstappen buscará afinar su estrategia para afrontar la difícil tarea de remontar desde una posición desfavorable en la parrilla de salida. Esta penalización y su reciente falta de victorias plantean un desafío significativo para el piloto y su equipo en esta etapa de la temporada.